
Viña la Rosa - La Capitana, Single Vineyards, Carmenere, 2023
$9.990

Cuerpo
Acidez
Dulzura
Frescor
Guarda
Notas aromáticas
Viña
Viña la RosaCepas
CarmenereCosecha
2023Familia aromática
Tostadas, Vegetales/Especiadas, FrutalesNotas de cata
Color
Se presenta con un intenso color rojo rubí, profundo y brillante, con matices violáceos en el borde, lo que denota su juventud y concentración. La lágrima es abundante y de densidad media, deslizándose lentamente por las paredes de la copa, sugiriendo un buen cuerpo y contenido alcohólico.
Aroma
En un primer acercamiento, la nariz es sumamente expresiva y frutal. Predominan los aromas a frutas negras maduras, como mora, arándano y ciruela. Se entrelazan con notas de frutas rojas como frambuesa y cereza. Es muy característico el toque herbáceo o especiado del Carmenere, que en este vino joven se manifestará como pimiento rojo asado, pimentón dulce, y quizás un toque de pimienta negra o especias de cocina. Dada su juventud, los aromas de madera serán sutiles si los hay, posiblemente aportando un ligero toque de vainilla o chocolate, pero la fruta será la protagonista principal. La frescura de la añada 2023 asegura que la expresión frutal esté en primer plano.
Sabor
El ataque en boca es suave y envolvente, con una sensación de fruta dulce y madura. En el paladar medio, el vino demuestra un cuerpo medio a completo, con taninos redondos y pulidos que aportan estructura sin astringencia. La acidez es equilibrada, aportando frescura y vivacidad. Los sabores confirman los aromas percibidos: frutas negras, toques de pimiento asado y un fondo especiado. El final es de persistencia media, dejando un grato retrogusto a fruta madura y las características notas especiadas del Carmenere. Es un vino que invita a seguir bebiendo.
Comentario del Sommelier
"Los profundos antecedentes históricos de Viña La Rosa, ubicada en Peumo, en el corazón del Valle de Cachapoal, se remontan a 1824. En ese año, la familia Ossa adquirió la hacienda de manos de Manuel Blanco Encalada, una figura histórica que pasaría a la posteridad como el primer presidente de Chile. Esta compra no solo fue el punto de partida para la viña, sino también para el desarrollo de la empresa frutícola familiar, Sofruco. Actualmente, tanto la bodega La Rosa como Sofruco son orgullosamente lideradas por la sexta generación de la familia Ossa, manteniendo viva una tradición centenaria. Viña La Rosa administra un total de 680 hectáreas plantadas que se extienden a lo largo de tres campos distintivos: La Rosa, Cornellana y La Palmería. Bajo la dirección del enólogo Gonzalo Cárcamo, quien ha formado parte de la empresa desde 1998, la viña cultiva un estilo característico. Vinos amplios y maduros, especialmente notorios en sus etiquetas tintas. Su máxima expresión se encuentra en el Carménère premium La Rosa, que encapsula la calidad y el terroir de Peumo."
sommelier